Con frecuencia se ha
considerado que el condicionamiento pavloviano —también conocido como clásico,
juega un papel relevante en la configuración del comportamiento del ser humano,
mediante el cambio de actitudes hacia objetos neutros, al modificar su valor
afectivo este procedimiento permite influir en la conducta del individuo.
No en vano en ocasiones se
ha considerado a Pavlov, descubridor del condicionamiento que lleva su nombre.
Pavlov comprobó en sus famosos experimentos con perros que la aparición
reiterada de un evento originalmente neutro, conocido como estímulo
condicionado o EC precediendo a otro biológicamente importante, estímulo
incondicionado o El, que desencadena automáticamente una reacción refleja,
denominada respuesta incondicionada o Rl (entre otras, secreción de saliva),
hace que la mera presentación aislada del EC acabe por producir también una
reacción similar a la Rl, conocida como respuesta condicionada (RC). En
esencia, en esto consiste el condicionamiento clásico, como es bien sabido.
A partir de este fenómeno
básico, se han observado varias características y parámetros, algunos de los
cuales pueden tener especial relevancia para la conducta del individuo.
El propósito central de
este trabajo es presentar las diferentes técnicas con las que puede trabajar
tanto el terapeuta como el orientador de conducta. Para ello, se desarrollan
las mismas dando respuestas a su aplicación
de acuerdo a las conductas que se presenten, asimismo se explica su
objetivo, procedimiento, entre otros. A
continuación se procede a señalar algunas de ellas y sus implicaciones
prácticas para el tema del Condicionamiento Clásico.
CONDICIONAMIENTO CLÁSICO
El condicionamiento clásico,
también llamado condicionamiento
pavloviano y condicionamiento respondiente, o modelo Estimulo-Estimulo (E-E), es un
tipo de aprendizaje asociativo que fue demostrado por primera vez por Iván Pávlov. La forma
más simple de condicionamiento clásico recuerda lo que Aristóteles llamaría
la ley de contigüidad. En esencia, el filósofo dijo "Cuando dos cosas
suelen ocurrir juntas, la aparición de una traerá la otra a la mente".
A pesar de que la ley de la contigüidad es uno de los axiomas primordiales de
la teoría del condicionamiento clásico, la explicación al fenómeno dada por
estos teóricos difiere radicalmente de la expuesta por Aristóteles, ya que
ponen especial énfasis en no hacer alusión alguna a conceptos como
"mente". Esto es, todos aquellos conceptos no medibles,
cuantificables y directamente observables. El interés inicial de Pavlov era
estudiar la fisiología digestiva, lo cual hizo en perros y le valió un premio Nobel en 1904.
En el proceso, diseñó el esquema del condicionamiento clásico a partir de sus
observaciones:
EI
-------> RI
EC
-------> RC
La primera línea del esquema muestra una relación
natural, no condicionada o incondicionada
entre un estímulo (EI = Estímulo incondicionado o natural) y una respuesta (RI
= Respuesta incondicionada). Los perros salivan (RI) naturalmente ante la
presencia de comida (EI).
Sin embargo, en virtud de la contigüidad temporal,
es posible que otro estímulo pase a evocar también la RI, aunque antes no lo
hiciera. Por ejemplo, la presencia del sonido de un diapasón unos segundos
antes de la presentación de la comida: después de algunos pocos ensayos, el
ruido del diapasón evocaría confiablemente y por sí solo la respuesta de
salivación. Se completa así la segunda línea, y la campana se convierte en un estímulo condicionado que produce una respuesta condicionada.
Muchos estímulos ambientales producen respuestas reflejas
que no han sido aprendidas. Por ejemplo, la presencia de comida en la boca
produce salivación, un ruido fuerte causa sobresalto, la luz intensa produce
contracción de las pupilas, etc. Los estímulos que producen estas respuestas se
conocen como estímulos incondicionados, y las respuestas se conocen como
respuestas incondicionadas. En este caso, el término "incondicionado"
significa que no es necesario el aprendizaje para que el estímulo provoque la
respuesta.
Otros estímulos son neutros porque no causan las
respuestas reflejas en el organismo. Por ejemplo, el sonido de una campanita no
provocará la salivación.
El condicionamiento clásico ocurre cuando el estímulo
neutro adquiere la propiedad de producir la respuesta incondicionada, porque ha
sido asociado repetidas veces con el estímulo incondicionado. Por ejemplo, si
haces sonar una campanita cada vez que le das comida a tu perro, después de
unas cuantas veces él asociará el sonido de la campanita con la comida y
salivará cada vez que lo escuche.
El estímulo neutro que ha adquirido la propiedad de
producir la respuesta refleja se conoce como estímulo condicionado. El término
"condicionado" significa que el aprendizaje es necesario para que el
estímulo provoque la respuesta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario